PENSAMIENTOS DE LA MADRE TERESA DE CALCUTA

PENSAMIENTOS DE LA MADRE TERESA DE CALCUTA
Existe mas hambre de amor y aprecio en este mundo que de pan.
Si en verdad queremos amar, tenemos que aprender a perdonar.
Hay una cosa muy bonita: compartir la alegría de amar. Amarnos los unos a los otros. Amar hasta el dolor.
El dinero sólo puede comprar cosas materiales, como alimentos, ropas y vivienda. Pero se necesita algo más. Hay males que no se pueden curar sólo con dinero... sino sólo con amor.
La peor enfermedad que acecha al mundo occidental no es la tuberculosis o la lepra; es el hecho de no ser deseado, es que nadie nos ame ni se preocupe por nosotros. El mundo no necesita cañones; solo hace falta amor y comprensión.
Ama hasta que te duela, si te duele es la mejor señal
Amar al prójimo debe ser tan natural como vivir y respirar.
Amo todas las religiones, pero estoy enamorada de la mía.
Cada obra de amor, llevada a cabo con todo el corazón, siempre logrará acercar a la gente a Dios.
Cuanto menos poseemos, más podemos dar. Parece imposible, pero no lo es. Esa es la lógica del amor.
El amor auténtico duele. Jesús, por nosotros, murió en la cruz. Nuestra madre, al darnos a luz, también sufrió. En el verdadero amor está presente el sacrificio.
El amor no puede permanecer en sí mismo. No tiene sentido. El amor tiene que ponerse en acción. Esa actividad nos llevará al servicio.
El amor empieza en el hogar. Si no nos amamos los que convivimos las 24 horas, ¿cómo vamos a amar a los que no vemos más que una sola vez en la vida?.
El amor, para que sea auténtico, debe costarnos.
El amor y el bien es una red con la que se pueden capturar muchas almas.
En el momento de la muerte, no se nos juzgará por la cantidad de trabajo que hayamos hecho, sino por el peso de amor que hayamos puesto en nuestro trabajo. Este amor debe resultar del sacrificio de sí mismos y ha de sentirse hasta que haga daño.
Nuestra tarea consiste en animar a cristianos y no cristianos a realizar obras de amor. Y cada obra de amor, hecha de todo corazón, acerca a las personas a Dios.
Podemos estar ya ahora con Dios en el cielo; podemos ser felices con él en este preciso instante, si amamos como Él ama, si ayudamos como Él ayuda, si damos como Él da, si servimos como Él sirve